Claves para elegir cosmética natural de calidad ¿en qué fijarse? | compraetica.com

Claves para elegir cosmética natural de calidad ¿en qué fijarse?

Actualmente, es muy fácil encontrar un gran número de opiniones, recomendaciones e información sobre todo tipo de cosméticos pero, ¿y la cosmética natural? ¿Cómo puedes saber si un producto es adecuado para ti? ¿Cómo cerciorarte de que es realmente ecológico? Hoy, disipamos estas dudas y te contamos en qué has de fijarte para saber si realmente ese cosmético es tan ecológico como asegura su etiqueta y si es saludable y seguro para ti.

5 claves para saber que te encuentras ante un producto natural de cosmética saludable

Los cosméticos no son solamente los champús y las cremas hidratantes. Son tu jabón de manos, gel de ducha, productos de higiene oral, entre otros. Como ves, estás rodeado de cosméticos. Merece la pena que sean respetuosos para el medio ambiente, ¿verdad? Aprende a distinguirlos y, ¡haz una compra realmente sostenible!

1. Cómo saber si realmente es un producto ecológico

Los productos "eco" están de moda y estamos rodeados de informaciones que nos aseguran «con ingredientes naturales», «100 % vegano», «biológico»... ¿hasta qué punto son ciertos? Primero, ten en cuenta qué significa realmente «ecológico», o lo que es lo mismo, «biológico», «eco-friendly», «sostenible» y muchos sinónimos más.

Los cosméticos ecológicos son aquellos que utilizan aceites esenciales vegetales, extractos de plantas e ingredientes naturales como la manteca de coco, el aloe vera, etc. Y, además, debe proceder de agricultura certificada como ecológica, es decir, que respeta la naturaleza de la tierra, sin utilizar pesticidas ni fertilizantes artificiales.

Como podrás deducir, los cosméticos convencionales apenas contienen ingredientes con estas características. Así, si en la etiqueta no aparece escrito que proceden de agricultura ecológica, desconfía. Así que fíjate si tiene:

- Ecoetiqueta: aprende a identificar los sellos de calidad. No olvides que debes tener especial cuidado, ya que algunos no certifican su procedencia ecológica sino otros aspectos. Consulta en Internet cuáles son los sellos cuyos símbolos ves en el etiquetado.

- Distintivo BIO: presta atención, porque algunas marcas utilizan sus propios sellos como certificado y pueden estar encubriendo ingredientes que no son nada ecológicos. Es lo que se conoce como greenwashing, que es el nombre que reciben las estrategias de marketing que intentan engañar al consumidor ofreciendo un cosmético orgánico o natural y respetuoso del medio ambiente, cuando en realidad no lo es. De nuevo, te recomendamos consultar la lista de los certificados oficiales.

- Empresa certificadora: también es importante saber quién otorga el sello. Es muy importante que se trate de una organización o asociación externa al producto. Toma nota de algunas de ellas:

Ecocert.

Bio.inspecta.

Cosmebio.

BDIH.

Soil Association.

ICEA.

Natrue.

USDA.

2. Aprende a leer los ingredientes

No hace falta haber estudiado una carrera científica para ello. Todos siguen la International Nomenclature Cosmetic Ingredient (INCI) (nomenclatura internacional del ingrediente cosmético), que dicta que los ingredientes deben mencionarse en orden de importancia y proporción. Es decir, deben aparecer primero los que se encuentran en mayor proporción y finalmente los que están en menor proporción. Así, no te dejes engañar si un producto anuncia un ingrediente natural como componente estrella y luego ves en los ingredientes que se encuentra entre los últimos, después de una larga lista de químicos.

El problema es que, en la etiqueta, los ingredientes vienen en inglés o en su nombre científico en latín. Algunos ingredientes naturales son:

Aqua, water o distilate: hidrolato o agua floral.

Extract: extracto.

Oil: aceite.

Butter: manteca vegetal.

Wax: cera vegetal.

Sin embargo, ten en cuenta que parfum hace referencia a cualquier sustancia que de aroma al cosmético, desde un aceite esencial natural hasta un químico del que sospecha que pueda ser cancerígeno, como el tolueno o los ftalatos. De todas maneras, de tratarse de un aceite esencial, normalmente aparecerá con el nombre científico de la planta y las palabras essential oil.

A veces, puede ser un poco difícil identificar un ingrediente natural. Por ejemplo, el ácido cítrico (citric acid) tiene un nombre que suena a química, pero es el mismo ácido que está presente en las naranjas y limones.

Además, el INCI utiliza asteriscos en los ingredientes para indicar:

* (un asterisco) que se trata de un ingrediente ecológico.

** (dos asteriscos) que se trata de una sustancia que se genera de forma natural en el proceso de obtención del ingrediente, como el aceite esencial.

3. Fíjate en las fechas

Antes de comprarlo, lee la fecha de caducidad y el tiempo que puedes guardar el cosmético una vez abierto. Muchas veces, los productos naturales caducan antes, ya que no llevan tantos químicos que actúan de conservadores.

Para evitar que se estropeen los productos, no los compres si no vas a comenzar a utilizar pronto y apunta la fecha de cuando lo abres en el envase. Así, sabrás siempre el tiempo en el que aún se mantendrá en condiciones.

4. Entra en la web de la marca

Es difícil que tengas toda la información que necesitas en la etiqueta que ves cuando compras el producto. Si entras en la página web de la marca, seguramente podrás ver los ingredientes del producto, sus propiedades, cualidades, procedencia, etc. Además, tendrás tiempo de averiguar qué es exactamente cada ingrediente buscándolo en Internet y conocer los posibles productos químicos que pueden ser perjudiciales para tu salud.

5. El precio

Desgraciadamente, el precio de los cosméticos naturales suele ser un poco más caro. Es muy comprensible: no solo se trata de cosmética de calidad, sino que suele costar más obtenerlos, ya que hay que obtener los ingredientes de diferentes fuentes y someterlas a procesos más complejos al extraer el ingrediente de su fuente natural.

Así que no te fíes si ves un producto con el mismo precio que los cosméticos artificiales y te asegura que es natural. Aun así, el precio no es determinante. Oriéntate más por los consejos anteriores y busca inmediatamente el sello que lo certifique y cuáles son sus ingredientes.

Ahora ya sabes cómo acertar a la hora de comprar un producto de cosmética natural. Aprovecha la valiosa información que consigues gracias a la etiqueta del cosmético y de Internet, ¡es tu derecho! Y si quieres descubrir marcas que siguen estos principios, en nuestro directorio de cosmética natural encontrarás muchas de ellas.


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