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Las comidas apresuradas, los vestidos baratos y los muebles rápidos no provocan historias que contar ni se transmiten de generación en generación. Pero los muebles pertenecientes al movimiento Slow Furniture sí lo hacen.

En HANNUN llevan años trabajando para convertirse en una empresa que produce muebles de origen sostenible, apostando por una industria del mueble Slow Furniture que respete nuestro planeta y cuide el medio en el que vivimos.

¿Qué es el Movimiento Slow Furniture? El movimiento Slow Furniture abarca la creación y el uso deliberados de muebles duraderos. Tiene su origen en el Movimiento Slow que valora la calidad por encima de la rapidez. Ha surgido como respuesta a la producción en masa de muebles "rápidos" desechables.

En el movimiento lento (Slow Food, Slow Fashion y Slow Furniture) no se trata solo de tomarse el tiempo para hacer las cosas de la manera correcta. Se trata de invertir en el disfrute que proviene de construir algo bien, seleccionar los componentes, usar algo bien hecho y utilizarlo en su máxima duración.

El movimiento lento está en auge. Los 5 principios del movimiento Slow Furniture son:

  • Invierte en muebles de calidad y muy duraderos
  • Son recomendables los muebles que sean multifuncionales
  • Acepta el tiempo extra que se necesita para hacer buenos muebles.
  • Apoya la producción de muebles que paga y trata a los trabajadores de manera justa
  • Rechaza muebles rápidos fabricados en masa y baratos

El Fast furniture es como el fast food o el fast fashion

HANNUN lleva vendidos 53.594 muebles, de los cuales el 95% son de origen sostenible. Asimismo, su compromiso social, los lleva a apoyar el pequeño comercio y la economía de proximidad. Trabajan con talleres de artesanos que fabrican a mano y hacen cada pieza única. ¡Ya son 25 talleres empleando directamente a más de 60 artesanos!

HANNUN reutiliza madera: mediante la iniciativa Reuse Market se comprometen con la filosofía Zero Waste.

Cuando se utiliza madera recuperada se ayuda a frenar la deforestación. La madera recuperada es un recurso renovable que reduce los desechos de los vertederos, así como el uso de productos tóxicos para fabricar nuevos productos. Los muebles de madera recuperada requieren menos pinturas y tintes, por lo que son menos contaminantes.

Rebajan el precio de aquellos muebles que han sido ligeramente dañados durante el transporte, son devueltos por los clientes o contienen alguna pequeña tara. De este modo, dan salida a estos productos para evitar que se conviertan en residuos y desperdiciar lo menos posible.

Los artesanos de HANNUN sólo utilizan barnices respetuosos con el medio ambiente que confieren un acabado a los productos lo más natural posible. Los barnices ecológicos se fabrican con bases como aceite de linaza, cera, pigmentos minerales e incluso agua. Además de realzar la belleza de las superficies de madera, el barniz de aceite de linaza reduce el agrietamiento y la descamación cuando se aplica a superficies de madera. Estos barnices no contienen toxinas en su composición por lo que no contaminan; a diferencia de los barnices usuales, compuestos de sustancias químicas muy tóxicas.

HANNUN también cuenta con la certificación PEFC (Asociación para la Certificación Española Forestal) y con el sello FSC (Forest Stewardship Council) que acreditan que solo utilizan maderas procedentes de bosques sostenibles. Estos certificados son concedidos a todos los involucrados en la cadena de producción, tanto a las empresas forestales como a los que comercializamos finalmente el producto.

HANNUN - compraetica.com

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